
Esta obra está inspirada en una pintura al óleo que lleva el mismo nombre y que fue la primera obra en materializarse después de muchos años de haber dejado mi esencia. Afortunadamente para mí, hoy ha resurgido con mucho más fuerza, ha “despertado” mi guerrero interno y esta vez para quedarse.
Todos somos Guerrer@s, cada quien tiene sus propios motivos por los cuales luchar, sus propios obstáculos que vencer, la lucha es un@ con un@ mism@.
El Guerrero siempre ha estado allí, sólo que a veces lo olvidamos, presto para hacerse presente cuando el momento preciso llegue.
Material: Resina con fibra de vidrio.
Año: Agosto 2019
Medidas: 29.50 cm Alto x 19.50 cm de Largo x 05.00 cm Profundidad

El Guerrero no ha muerto, sólo aguarda el momento en hacerse presente y luchar.
El guerrero es la representación de la Voluntad, símbolo del espíritu combativo e implacable que todos llevamos pero que a veces se nos olvida que allí está.
El Guerrero águila (Cuāuhpilli) está ensoñando ataviado con las plumas del águila, animal solar y venerado por nuestros grandes abuelos. La cabeza del guerrero emergiendo del águila contemplativo mientras que el ave observa con los ojos bien abiertos. Esto no es sino un mensaje que intenta decir que para ver “la realidad” a veces se deben cerrar los ojos y mirar con los ojos de nuestra esencia.
La Transmutación del Guerrero
